EL DESEO DE NAVIDAD DE JAIME
Esta es la
historia de Jaime un humilde niño de tan sólo 8 años de edad, a su corta edad
había sufrido mucho y era de origen muy humilde, como todo pequeño estaba lleno
de sueños e ilusiones, el pobre sufría cada vez que veía a los otros niños de
su edad jugando o disfrutando bellos momentos junto a sus padres y es que
Jaimito era huérfano de padre y madre, los mismos habían fallecido en un
accidente automovilístico años atrás cuando era muy pequeño, así que no tenía
ningún recuerdo legible de los mismos en su memoria, sólo fotos y vagos
recuerdos que su abuelita Tita la mujer que había quedado a su cuidado le
mostraba o contaba dependiendo del caso.
Su abuelita Tita le daba todo el cariño que su edad le
permitía sin embargo no era suficiente porqué nadie puede dar el cariño de los
padres y eso Jaimito lo sufría en carne propia, su abuelita era muy pobre y por
su avanzada edad no podía ya trabajar para llevar el sustento al hogar es por
eso que a veces ninguno de dos comían, la pobreza extrema se había adueñado de
su hogar.
Se acercaban las fiestas navideñas y Jaimito no soñaba con
juguetes, ni comida como los demás niños, miraba los árboles adornados, las
guirnaldas, los adornos, pero nada le llamaba la atención, el sólo tenía un
sueño volver a reunirse con sus padres y conocerlos.
Su abuelita le contaba la historia del verdadero
significado de la navidad, del nacimiento del Niño Dios y la historia de Santa
Claus aquél hombre que llevaba regalos a los niños que se portaban bien, pero
para eso se le tenía que escribir una carta a ambos para cumplir los sueños y
deseos de los pequeños, Jaime al escuchar esto decidió escribir dos cartas; Una
para el niño dios y otra para Santa con el propósito de ver cumplir su anhelado
sueño: Ver a sus padres.
Jaimito lleno de inocencia y con todas sus fuerzas
escribió ambas cartas y se las dio a su abuelita con el fin de que ella se las
hiciera llegar a ambos, la abuelita no se atrevía a leer las cartas por respeto
a su nietecito y a la inocencia y pureza con la que había escrito las mismas.
Unos días antes que llegará la navidad, el pequeño Jaimito
enfermo gravemente y su abuelita estaba desesperada por ayudarlo, rezo y rezo,
pero todo fue en vano una noche Jaimito no despertó jamás.
El niño murió una noche de navidad con una sonrisa en sus
labios, porqué justo en ese momento tenía frente a él a sus padres con las cuales
logró cumplir su sueño de navidad: Conocerlos.
Días después Doña Tita también murió por la tristeza de
haber enterrado a su nietecito y ahora juntos todos están en un lugar
maravilloso, en familia como siempre lo soñaron y es que las cartas que Jaime
envió sí llegaron a su destino y su deseo de navidad se cumplió.
Autor: Robert Allen Goodrich V.
Panamá.
