Antecedentes del 9 de
Enero
Por Ricardo Arturo Ríos
Torres
El pasado se abre a
zarpazos.
Khaled Hosseini
Cometas en el cielo.
Nuestra juventud es estandarte y
pluma,
tinta y sangre con que tendrá
que escribirse la historia del
futuro.
Jorge Conte Porras
La Rebelión de las
Esfinges.
Los acontecimientos
históricos de magnitud, como el 9 de Enero de 1964, son consecuencia de un
devenir que lo sustenta.
El 18 de noviembre de
1903, Estados Unidos nos impone el oprobioso tratado del Panamá Cede, el Hay-Bunau
Varilla. Surge, a perpetuidad, el enclave colonial de la Zona del Canal. Y desde
ese instante, se inicia la saga por la Soberanía y la lucha por la
bandera en la Gran Zanja.
Amelia Denis De Icaza
y Gaspar Octavio Hernández son las primeras voces líricas que denuncian la
arrogancia de las águilas imperiales.
La negociación del
Tratado Kellog-Alfaro de 1926,
une a la ciudadanía
militante de José Dolores Moscote y colectivamente se rechaza ese
acuerdo. El movimiento estudiantil y los profesionales de Acción Comunal dirigen la
protesta popular.
La Segunda Guerra
Mundial es la excusa del Imperio de Wall Street y siembran 136 bases militares (15,000
hectáreas) en todo el territorio nacional. Al finalizar el conflicto bélico, los
Estados Unidos exige una convención que le autoriza mantener por 20 años más
esas bases. La Federación de Estudiantes de Panamá, el Frente Patriótico de la
Juventud, los educadores, sindicatos y los intelectuales contestatarios
organizan el rechazo a esa pretensión. Se da la marcha del 12 de diciembre de 1947, la
Fuerza Pública enfrenta a los manifestantes y es herido Sebastián Tapia. El 22 de
diciembre de 1947 ante la presión nacional la Asamblea de Diputados vota,
unánimemente, contra el Convenio
Filós-Hines.
El
Tratado Remón-Eisenhower de 1955 promueve
el rechazo de la juventud, la Asociación Federada del Instituto Nacional (AFIN)
convoca a una marcha de protesta que sale del Nido de Águilas hacia la Plaza 5
de Mayo, allí se celebraba “La cita con la Patria” organizada por el gobierno de
Remón Cantera. Los estudiantes son reprimidos por la Policía secreta. El Tratado
Remón-Eisenhower permitió la instalación de los estadounidenses en Río Hato (115
kilómetros) durante quince años.
La
épica de la bandera.
El
12 de diciembre de 1957 se celebra el II
Congreso Extraordinario de la Federación de Estudiantes en el Instituto
Nacional. Soberanía es la
palabra de orden, la prioridad máxima.
Surge la Generación
del 58, se da la Operación
Soberanía del 2 de mayo de 1958 y la Marcha Patriótica del 3 de
noviembre de 1959, ante la retórica canalera la juventud asume una posición
vertical e irrumpe, pacíficamente, en el enclave colonial y siembra banderas de
dignidad. El movimiento estudiantil obliga a superar la Etapa Revisionista por
la Etapa Abrogacionista, en las negociaciones canaleras.
Soberanía es la consigna, sin
enclave colonial, ni perpetuidad ni zonians, queremos el Canal.
Roberto. F. Chiari, con visión de estadista, insiste en izar la bandera
nacional en la Zona del Canal. Se da la acción del “Triángulo Shaler” en 1960. A
fines de 1963 se enarbola en once sitios a lo largo del territorio ocupado por
los Estados Unidos. El Presidente Chiari logra que John F. Kennedy firme el
Acuerdo Chiari-Kenedy en 1963, para izar la bandera panameña en los sitios
públicos del área canalera. He aquí la paradoja, Kennedy pensaba que era una
concesión simbólica y se convirtió en el detonante del 9 de enero de
1964.
La odisea por la
Soberanía iniciada desde 1903 es el fundamento histórico de la Gesta Mártir y
Heroica del 9 de Enero de 1964.
Se inicia enero de
1964, el Gobernador de la Zona del Canal, Robert Fleming y los zonians se niegan
a cumplir el Acuerdo Chiari-Kennedy de 1963. El Nido de Águilas asume el
liderazgo y denuncia el incumplimiento de lo pactado, informan a la Cancillería
que marcharan, pacíficamente, al corazón del enclave colonial, la Escuela de
Balboa, sede de los zonians más recalcitrantes e izar allí, la bandera
nacional.
Los graduandos del
Instituto Nacional, marchan en silencio, hacia el área canalera, son 200
aguiluchos, acompañados por los profesores:
Arnulfo Martinelli
Camargo (Educación Física)
Rosada Guerrero de
González (Geografía e Historia)
Vesta Patiño
(Historia)
Rubén Oro (Química y
Física)
Generoso Emiliani
(Química)
Bernardo Mcnali
(Inglés)
Rosario Pabilo Pabilo
(Historia)
Diamantina Calzadilla
(Historia)
Carlos Arrieta
(Historia).
Nota. Rosada Guerrero
y Carlos Arrieta participan en la Operación Soberanía del 2 de mayo de
1958.
Al llegar a los
predios del edificio de Administración del Canal de Panamá, son detenidos por la
Policía de los zonians. Llegan a un acuerdo con el jefe de la policía canalera y
una delegación de institutores, integrada por: Inocencio García, Luis Alberto
Vergara, Eligio Carranza, César Villareal, José Napoleón Bernard, Alcibíades
Picota marchan con la Bandera Nacional hasta la Escuela de Balboa escoltados por
la policía estadounidense. Allí son agredidos por los zonians, rompen nuestra
enseña y se dispara la indignación de todos los panameños. El ejército de los
Estados Unidos reprime con violencia la protesta popular y 21 panameños son
asesinados.
Los principales
enfrentamientos, con el Coloso del Norte, se dan en las ciudades de Panamá y
Colón. Coclé organiza un
Comité de Defensa de la Soberanía y centenares de coclesanos se toman la Base
Militar de los Estados Unidos en Río Hato, el 11 de enero de 1964. Roberto F.
Chiari, el presidente de la dignidad nacional, rompe relaciones diplomáticas con
el país del águila imperial.
Los Héroes
y Mártires del 9 de
Enero son:
Ascanio Arosemena,
Ezequiel González Meneses, Estanislao Orobio, Víctor Manuel Iglesias, Gonzalo
Crance Robles, Teófilo de la Torre, Alberto Oriol Jr., Rodolfo Benítez Sánchez,
Víctor Manuel Garibaldo, Ricardo Murgas, Rosa E. Landecho, Maritza Alabarca,
Rogelio Lara, Jacinto Palacios Cobos, Vicente Bonilla, Jorge Enrique Gill,
Alberto Nicolás Constante, José del Cid, Lizardo Saldaña Armuelles, Renato Lara,
Celestino Villareta.
Nota. Víctor Manuel
Iglesias, Estanislao Orobio y Ezequiel González Meneses militan en la Generación del
58.
Hoy comemos Soberanía gracias la juventud
panameña.
Recomiendo para
ampliar información sobre el 9 de enero, el ensayo “La patria estudiantil
panameña” en Memoria
de mis memorias,
el prólogo de Los
Rostros del Tiempo
en su 3ª.ed. corregida y aumentada, obras de mi autoría y el libro Misión
a Washington de
Miguel Moreno y la novela El
Desenterrador de
Ramón Fonseca.
Ensayo dedicado al
Movimiento por el rescate de la
Identidad y Memoria Histórica.
Nota. El día puente es una ofensa a
la saga por la Soberanía y confirma la actitud antipatriótica de Lucy Molinar al
eliminar la Cátedra de las Relaciones de Panamá con los Estados
Unidos.